Innovación sostenible, transformando los centros de datos para un futuro energético responsable, en un mundo donde la energía se desperdicia en un 60%, es imperativo replantear nuestra relación con este recurso vital. La Hora del Planeta se erige como un llamado urgente a la acción, instándonos a reconsiderar nuestras prácticas de consumo y explorar alternativas que mejoren la eficiencia en el uso de los recursos.
Sumarse a esta iniciativa no solo representa un gesto simbólico, sino un compromiso tangible con la lucha contra el cambio climático y la construcción de un futuro más sostenible. Sin embargo, apagar las luces durante una hora es solo el comienzo. ¿Qué otras acciones podemos emprender para hacer un mejor uso de la energía?
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Fomentar el uso responsable de la energía es esencial para abordar los desafíos energéticos que enfrentamos en la actualidad. Desde apagar luces en áreas desocupadas hasta desconectar electrodomésticos en reposo, cada gesto cuenta en la búsqueda de una mayor eficiencia energética. Pero, ¿qué sucede en estructuras críticas como hospitales y plantas de fabricación, donde la demanda energética es constante? Aquí es donde entra en juego la innovación tecnológica.
En el contexto de la transformación digital, donde los smartphones y la inteligencia artificial se han convertido en herramientas cotidianas para miles de millones de personas, la demanda de infraestructura digital, especialmente de centros de datos, está en constante aumento. Sin embargo, esta masificación plantea desafíos significativos en términos de consumo de energía. Se estima que los centros de datos consumen alrededor de 200 teravatios hora (TWh) de energía, y se espera que esta cifra aumente drásticamente en los próximos años.
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Ante este panorama, la eficiencia energética en los centros de datos se vuelve fundamental. Es aquí donde empresas como Schneider Electric están liderando el camino con soluciones innovadoras y sostenibles. Desde sistemas de control inteligente hasta plataformas de monitorización en tiempo real, estas soluciones no solo garantizan un consumo energético controlado, sino que también ayudan a reducir la huella de carbono de las infraestructuras digitales.
El compromiso con la eficiencia energética en los centros de datos es un claro ejemplo de cómo la tecnología puede ser parte de la solución en la lucha contra el cambio climático. Al aprovechar la innovación y la ingeniería, estamos demostrando que es posible alcanzar un equilibrio entre el progreso tecnológico y la sostenibilidad ambiental. Sin embargo, esto requiere una colaboración activa entre empresas, reguladores y consumidores.
La Hora del Planeta no solo es un gesto simbólico, sino un llamado a la acción para preservar nuestro hogar común: la Tierra. En un momento en el que el uso de la tecnología está generando un impacto significativo en el planeta, es crucial adoptar prácticas más sostenibles en el diseño, producción y uso de tecnología. Solo así podremos garantizar que el progreso tecnológico no se realice a expensas del medio ambiente, sino en armonía con él.
En Colombia, un país bendecido con una riqueza natural incomparable, esta responsabilidad adquiere una importancia aún mayor. Es hora de actuar, no solo por nosotros mismos, sino por las generaciones futuras que heredarán este planeta. Todos podemos ser agentes de cambio y contribuir a un futuro energético más responsable.
Por: Javier Ortíz, presidente del clúster Andino Norte (Colombia, Ecuador y Venezuela) de Schneider Electric