La cocina peruana, reconocida como la mejor del mundo por los World Travel Awards 2023, no solo enamora paladares, sino que también esconde un enorme potencial económico.
Así lo afirma Damian Manayay Sánchez, académico de Ingeniería e Industrias Alimentarias de la Universidad Le Cordon Bleu, quien destaca la necesidad de seguir impulsando la gastronomía peruana a través de innovaciones culinarias exportables.
«El reconocimiento del Perú como mejor destino culinario es una oportunidad excepcional para continuar innovando y aumentar la exportación de insumos y materias primas peruanas, impulsando la industrialización de nuestros productos», señala Manayay.
Un ejemplo de innovación es la iniciativa de la Universidad Le Cordon Bleu de pulverizar la leche de tigre, reduciendo su peso y mejorando su portabilidad para facilitar su exportación.
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«Al solo necesitar agregar agua para volver a su estado original, este producto conserva su auténtico sabor peruano y permite su uso en cualquier cocina del mundo sin perder su esencia», agrega el experto.
Manayay enfatiza que la innovación continua en la industrialización de productos peruanos no solo beneficia a la economía nacional, generando ingresos y empleos, sino que también impulsa el crecimiento de las fronteras agrícolas y el desarrollo rural.
«La exportación de insumos peruanos genera empleo en toda la cadena de valor, desde la agricultura y la extracción hasta la industrialización y la comercialización», explica Manayay. «Esto ayuda a reducir el desempleo y a mejorar el bienestar de las comunidades locales, especialmente en las zonas rurales del país.»
Además, la industrialización de productos peruanos puede atraer inversión extranjera, tanto en la expansión de la producción como en la mejora de la infraestructura y tecnología relacionadas con la industria de exportación.
«El éxito en la exportación de insumos peruanos puede convertirnos en un referente global en materia de innovación culinaria», afirma Manayay.
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«Tenemos el potencial de construir un país estable y próspero a partir de nuestro tesoro nacional: la gastronomía peruana.»
En resumen, la industrialización de productos peruanos ofrece una serie de beneficios que contribuyen al desarrollo económico y social del país:
- Generación de ingresos: La exportación de insumos peruanos permite obtener divisas extranjeras, fortaleciendo la balanza comercial y generando recursos para el desarrollo del país.
- Incremento de empleos: La producción y exportación de insumos peruanos genera empleo en todas las etapas de la cadena de valor.
- Desarrollo rural: Impulsa el desarrollo económico y social en las áreas rurales y regiones menos desarrolladas del país, creando oportunidades para las comunidades locales.
- Aumento de inversión: Atrae inversión extranjera en la expansión de la producción y la mejora de la infraestructura y tecnología relacionadas con la industria de exportación.
La gastronomía peruana, con su exquisito sabor, su gran variedad de ingredientes y su potencial innovador, se posiciona como un motor fundamental para el desarrollo económico y social del Perú.
Es hora de seguir apostando por la innovación, la industrialización y la promoción de la gastronomía peruana en el mundo, para convertirla en un símbolo de orgullo nacional y un pilar fundamental del crecimiento del país.