En un contexto global marcado por la reconfiguración de las cadenas de suministro, México se ha posicionado como un destino estratégico para las empresas que buscan optimizar sus operaciones mediante el nearshoring.
Cifras contundentes respaldan esta afirmación:
Inversión en auge: La inversión extranjera directa (IED) vinculada al nearshoring experimentó un crecimiento del 47% durante los primeros nueve meses de 2023, en comparación con el mismo período en 2022, según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Llegada de nuevas empresas: Este incremento se tradujo en la llegada de más de 500 empresas al país, de acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de Fibras Inmobiliarias (AMEFIBRA).
Proyecciones optimistas: Se estima que el flujo de empresas continuará en ascenso, con proyecciones de la Corporación Financiera Internacional (IFC) que apuntan a la reubicación de más de 200 compañías de regiones clave como Asia, Estados Unidos y Europa del Este en México durante los próximos tres años.
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¿Qué hace a México tan atractivo para el nearshoring?
Infraestructura robusta: México cuenta con una infraestructura moderna y eficiente, incluyendo puertos, aeropuertos y carreteras que facilitan la logística y el transporte de mercancías.
Mano de obra calificada: El país posee una amplia fuerza laboral capacitada y con experiencia en diversos sectores, lo que representa un activo valioso para las empresas.
Posición geográfica estratégica: La ubicación de México, cercana a Estados Unidos, el principal mercado del mundo, lo convierte en un destino ideal para las empresas que buscan reducir costos y tiempos de entrega.
Sin embargo, este auge del nearshoring también presenta desafíos que deben ser abordados:
Protección de las empresas: Las empresas que se instalan en México necesitan asegurar sus operaciones y activos contra diversos riesgos, como robos, incendios, desastres naturales y problemas legales.
Bienestar de los empleados: Es fundamental garantizar un entorno laboral seguro y saludable para los trabajadores, incluyendo atención médica, apoyo para la salud mental y planes de jubilación.
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Adaptación a las necesidades del sector: Las soluciones de protección deben adaptarse a las necesidades específicas de cada sector industrial, considerando aspectos como seguros para maquinaria, flotas de vehículos y responsabilidad civil profesional.
El nearshoring presenta una gran oportunidad para México, pero también exige un enfoque integral que abarque la gestión de riesgos, la protección de las empresas y el bienestar de los colaboradores.