Carlos Torres, presidente del grupo financiero BBVA, afirmó este lunes que México podría duplicar la inversión extranjera directa (IED) en los próximos años si se solucionan los «cuellos de botella» que enfrenta en materia de energía, transporte y abastecimiento de agua.
El nearshoring, una oportunidad para México
Torres destacó que México se encuentra en una posición ideal para aprovechar el fenómeno del nearshoring, que consiste en la reubicación de las cadenas de suministro hacia países más cercanos a los mercados de consumo.
Factores que favorecen al país:
- Cercanía a Estados Unidos: Principal socio comercial de México.
- Fuertes perspectivas de crecimiento de la economía estadounidense en la próxima década.
- Expansión del mercado laboral mexicano: Con una masa salarial favorable y un flujo récord de remesas.
- Política industrial que promueve la inversión privada: Fundamental para aprovechar el potencial del nearshoring.
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Cuellos de botella que limitan el crecimiento
Sin embargo, Torres advirtió que para maximizar el potencial del nearshoring, México necesita resolver algunos desafíos:
Infraestructura energética: Se requiere mayor inversión en generación y distribución de energía para satisfacer la creciente demanda.
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Transporte: Se necesita mejorar la infraestructura vial y logística para agilizar el movimiento de mercancías.
Abastecimiento de agua: Es necesario garantizar un suministro de agua confiable y sostenible para las actividades productivas.
Acciones necesarias para duplicar la IED
Si México logra superar estos cuellos de botella, Torres considera que la IED podría duplicarse en los próximos años. Esto traería consigo beneficios para el país, como:
Creación de empleos: La inversión extranjera directa genera nuevos puestos de trabajo en diversos sectores de la economía.
Crecimiento económico: La IED impulsa el crecimiento del PIB y el desarrollo económico en general.
Mejora de la competitividad: La llegada de nuevas empresas y tecnologías aumenta la competitividad del país en el mercado global.
El papel del sector financiero
En este contexto, el sector financiero también tiene un papel importante que jugar. BBVA, por ejemplo, está comprometida a apoyar a las empresas mexicanas en su proceso de expansión y a los inversores extranjeros que buscan oportunidades en el país.
Torres concluyó su intervención afirmando que México tiene un gran potencial para convertirse en un hub global de manufactura y servicios. Si se toman las medidas adecuadas para resolver los cuellos de botella y aprovechar las oportunidades del nearshoring, el país puede alcanzar un crecimiento económico sostenido y generar bienestar para toda su población.
El mensaje de BBVA es claro: México tiene la oportunidad de duplicar su IED y convertirse en un jugador clave en la economía global. Sin embargo, para lograrlo, es necesario abordar los desafíos en materia de infraestructura y adoptar políticas públicas que promuevan la inversión privada.