El Impacto económico de las plazas comerciales en la capital: generación de empleo y activación urbana
Las plazas comerciales, en su evolución de simples espacios de compras a complejos centros urbanos, están desempeñando un papel crucial en la economía de la capital. Desde la creación del primer «mall» hace más de 30 años hasta la actualidad, estas estructuras no solo ofrecen oportunidades de consumo, sino que también generan empleo, activan la economía local y contribuyen al desarrollo de la ciudad. Exploraremos cómo el auge de las plazas comerciales se ha convertido en un fenómeno integral en la capital, transformando no solo el panorama comercial sino también el tejido social y económico de la región.
Cambio de paradigma en el desarrollo urbano
El empresario capitalino Eliseo Castro destaca el surgimiento de plazas comerciales como una respuesta a la falta de inversión pública. En un contexto donde la empresa privada ha asumido un papel protagónico, estas estructuras no solo satisfacen una demanda creciente de espacios de consumo, sino que también se convierten en motores de empleo. Castro enfatiza que los inversores realizan estudios de mercado para determinar la rentabilidad de una plaza comercial, lo que demuestra la conexión directa entre la oferta y la demanda en este sector.
Desde una perspectiva social, incluso las plazas comerciales más pequeñas generan decenas de empleos directos e indirectos, contribuyendo no solo al sustento de las familias, sino también al flujo de ingresos fiscales que benefician a la comunidad a través de obras y mejoras urbanas. Castro destaca cómo el crecimiento de estas plazas impulsa a los gobernantes a mejorar bulevares, calles y la infraestructura vehicular, demostrando un impacto positivo en el desarrollo urbano.
El papel del emprendimiento y la inversión privada
Eliseo Castro subraya que la fiebre de construir centros comerciales está intrínsecamente vinculada al espíritu emprendedor de los inversionistas empresariales. Ante la falta de inversión pública, la iniciativa privada asume la responsabilidad de impulsar el optimismo económico, generando empleos y contribuyendo al desarrollo sostenible de la ciudad. Este cambio en la dinámica de desarrollo urbano destaca la importancia de la inversión privada como catalizador para el crecimiento económico y la mejora de la calidad de vida de los habitantes de la capital.
El economista Henry Rodríguez identifica la rentabilidad y la seguridad como las principales razones detrás de la proliferación de plazas comerciales en la capital. La inversión en estos proyectos ofrece altas tasas de rentabilidad y una percepción de estabilidad en el retorno de la inversión. Rodríguez destaca cómo, incluso cuando un edificio se deteriora, la tierra sobre la cual se construye retiene su valor, convirtiendo a estas inversiones en opciones seguras y perdurables en el tiempo.
En términos de consumo, Rodríguez señala que en el país hay pocos rubros de inversión tan rentables como el comercio. La disponibilidad de opciones de financiamiento, especialmente a través de tarjetas de crédito, ha ampliado las posibilidades de adquisición para los consumidores, contribuyendo al éxito continuo de los negocios en estas plazas comerciales.
Henry Rodríguez destaca que aproximadamente el 60% de las tiendas en estas plazas son sucursales de negocios ya existentes, lo que demuestra una estrategia de expansión y consolidación. Este enfoque, conocido como «capital reciclado», evidencia la reinversión de las ganancias y la sostenibilidad del modelo de negocio. Rodríguez comenta que, después de cierto número de tiendas, la quinta puede salir «gratis», lo que subraya la eficiencia y la rentabilidad de este tipo de inversión.
Enumerando los sectores más fructíferos, Rodríguez destaca la banca, la telefonía celular y la industria, seguidos de cerca por el comercio. La apertura de una nueva sucursal bancaria, por ejemplo, puede ser un desafío significativo debido a la necesidad de capital considerable, lo que convierte al comercio en una opción más accesible y atractiva para los emprendedores.
Adolfo Lagos, titular de la Gerencia de Control de la Construcción (GCC), señala un aumento en la emisión de permisos para plazas comerciales en la zona sur, destacando el análisis estratégico de los constructores respecto al surgimiento de nuevas urbanizaciones. La relación entre el desarrollo inmobiliario y la construcción de plazas comerciales se evidencia en cómo los constructores buscan terrenos en áreas de crecimiento urbano.
Lagos también aborda el proceso de emisión de permisos, destacando que, si se cumplen todos los requisitos de otras dependencias, el permiso de construcción puede emitirse en unas dos semanas. Este proceso eficiente respalda el rápido desarrollo de proyectos comerciales y su contribución ágil a la economía local.
El auge de las plazas comerciales en la capital no solo refleja una respuesta a la demanda del mercado, sino también un cambio fundamental en la forma en que se aborda el desarrollo económico y urbano. Estos complejos no solo ofrecen opciones de consumo, sino que generan empleo, activan la economía y contribuyen al desarrollo sostenible de la ciudad.
La conexión entre la inversión privada, el espíritu emprendedor y el impacto positivo en la comunidad destaca cómo las plazas comerciales no solo son lugares de transacciones comerciales, sino también motores de cambio y desarrollo. A medida que la ciudad evoluciona, estas estructuras continúan desempeñando un papel crucial en la transformación y mejora continua de la vida urbana.
Con información de El Heraldo