Under Armour acordó pagar la cantidad de 434 millones de dólares a los miembros de una demanda colectiva que adquirieron acciones de la compañía entre el periodo comprendido desde el 16 de septiembre de 2015 hasta el 1 de noviembre de 2019. La demanda, presentada en 2017, alegaba que el fundador y entonces director ejecutivo, Kevin Plank, tergiversó de manera consciente o imprudente datos sobre la demanda de los consumidores de los productos de Under Armour, así como sobre los resultados financieros y operativos de la compañía. Esta información fue reportada por el Wall Street Journal.
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Aunque Under Armour no reconoció ninguna culpa o irregularidad en el asunto, el minorista de ropa deportiva también accedió a mantener separadas las funciones de director ejecutivo y presidente de la junta durante un período de tres años a partir de la fecha en que el acuerdo sea finalizado. Asimismo, se estableció que las acciones otorgadas al CEO, CFO y Chief Legal Officer de Under Armour estarán sujetas a una condición de adquisición de derechos basada en el desempeño, la cual será determinada por el Comité de Compensación y Capital Humano de la Junta Directiva.
Es importante mencionar que el acuerdo alcanzado deberá ser aprobado por el Tribunal de Distrito de EE.UU. en Maryland antes de que los pagos sean efectuados o los cambios entren en vigor. Para cumplir con el acuerdo, Under Armour planea utilizar efectivo disponible o recurrir a su línea de crédito renovable de 1.100 millones de dólares.
Además, en noviembre de 2019, Under Armour anunció que estaba siendo objeto de una investigación federal sobre sus prácticas contables desde el año 2017. En ese momento, se informó que tanto el Departamento de Justicia como la Comisión de Bolsa y Valores estaban examinando los informes financieros del minorista.
En respuesta a esta situación, Mehri Shadman, director jurídico y secretario corporativo de Under Armour, declaró que la empresa considera que sus prácticas de ventas, contables y divulgaciones fueron apropiadas, negando cualquier irregularidad en el caso. Esta situación ha permitido a la compañía poner fin a un litigio que se ha prolongado por más de siete años, evitando así posibles distracciones continuas y brindando certeza al negocio en un momento crucial en el que se están llevando a cabo importantes prioridades estratégicas.
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Por otro lado, en abril de 2024 Kevin Plank regresó como director ejecutivo de Under Armour, y en mayo del mismo año la empresa anunció planes de reestructuración tras un año fiscal del 2024 que resultó ser decepcionante y que finalizó el 31 de marzo de dicho año. Estos cambios forman parte de las estrategias clave que la compañía está implementando en su proceso de reajuste y reorganización interna para afrontar los desafíos presentes y futuros en el mercado.