Bodega Argentina más antigua sorprende con sus tiempos de producción
Colomé, la bodega más antigua de la Argentina, ha logrado mantener su prestigio y calidad en la producción de vinos desde su fundación en 1831. Situada en los Valles Calchaquíes, esta histórica bodega ha sabido adaptarse y evolucionar con el tiempo, alcanzando logros notables como la producción de vinos a alturas récord. En este artículo, exploraremos la rica historia de Colomé, su viñedo a mayor altura y cómo se han adaptado a los desafíos del terreno y el clima para producir vinos excepcionales.
Historia de Bodega Colomé
Fundación y Primeros Años
Colomé fue fundada en 1831 en la provincia de Salta, en una finca que era parte del patrimonio del último gobernador español de la región. La bodega fue un regalo de bodas para Ascensión Isasmendi, hija del gobernador, cuando se casó con José Dávalos. Ascensión Isasmendi, conocida como «la gran dama del vino salteño», realizó un viaje a Francia en 1850 y trajo consigo las primeras vides de malbec a Argentina, sentando las bases para lo que se convertiría en una industria vitivinícola próspera en la región.
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Desarrollo a lo largo de los años
Durante décadas, la familia Dávalos gestionó la bodega, mientras otras bodegas comenzaban a surgir en el Valle Calchaquí. Hoy en día, hay aproximadamente 180 bodegas en la región. Sin embargo, el cambio más significativo en la historia reciente de Colomé ocurrió en 2001, cuando el millonario suizo Donald Hess adquirió la bodega.
Era Donald Hess
Donald Hess, fascinado por los vinos de Colomé, decidió invertir en la bodega y modernizar sus instalaciones. Hess y su esposa Ursula se trasladaron a Colomé, adaptándose a las duras condiciones
Donald Hess, fascinado por los vinos de Colomé, decidió invertir en la bodega y modernizar sus instalaciones. Hess y su esposa Ursula se trasladaron a Colomé, adaptándose a las duras condiciones de la región, donde inicialmente no había calefacción y la electricidad provenía de generadores. A pesar de estas dificultades, Hess se comprometió a mejorar la infraestructura de la bodega, convirtiendo el antiguo casco de la estancia en un hotel boutique rodeado de viñedos y lavandas.
Innovación y altura
Uno de los mayores legados de Donald Hess fue su enfoque innovador en la viticultura. Decidió plantar vides a alturas sin precedentes. Primero, estableció viñedos en El Arenal a 2700 metros de altura. Luego, en un movimiento aún más audaz, creó el viñedo Altura Máxima a 3111 metros sobre el nivel del mar, en el departamento de Cachi. Este viñedo se convirtió en el más alto de Argentina, y uno de los más altos del mundo.
El desafío de la altura
Condiciones Extremas
Cultivar vides a alturas tan elevadas presenta numerosos desafíos. La altitud extrema implica una mayor exposición a la radiación solar, grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche y suelos pobres en nutrientes. Estas condiciones, sin embargo, también pueden favorecer la producción de vinos de alta calidad con características únicas.
Manejo y producción
Bajo la dirección del agrónomo tucumano Rafael Racedo Aragón y el enólogo francés Thibaut Delmothe, Colomé ha logrado producir vinos excepcionales en Altura Máxima. Los suelos aluvionales y la enorme amplitud térmica permiten cultivar malbec, pinot noir y sauvignon blanc con una intensidad y elegancia destacadas. Delmothe, quien llegó a Colomé hace 20 años, ha sido fundamental en el desarrollo de estos vinos, combinando su experiencia y pasión por la enología.
Riesgos y recompensas
Producir vino a gran altura requiere una inversión significativa y un manejo cuidadoso. Las condiciones pueden ser extremadamente difíciles, como lo demostró una helada reciente que arrasó con la producción de uvas en un año. Sin embargo, los resultados pueden ser extraordinarios, y Colomé ha asumido estos riesgos en busca de vinos innovadores y de alta calidad. En un contexto global donde el consumo de vino está cambiando, los consumidores valoran cada vez más la singularidad y la calidad, lo que da a Colomé una ventaja competitiva.
Exportación y mercado internacional
Colomé ha logrado posicionarse en el mercado internacional, exportando el 50% de su producción. La bodega tiene planes de aumentar esta cifra al 70%, como antes de la pandemia. Los vinos de Colomé son reconocidos por su calidad y características únicas, derivadas de las condiciones extremas de cultivo en los Valles Calchaquíes.
Donald Hess falleció en 2023, pero su legado continúa. Hoy en día, la bodega y el hotel boutique son gestionados por su hija Larissa y su yerno Christoph Ehrbar. Aunque residen en Europa, visitan regularmente Salta para supervisar el negocio y disfrutar de la hospitalidad y la cocina local. El restaurante del hotel, dirigido por la chef Patricia Courtois, ofrece platos que resaltan los productos locales, como quesos de cabra, estofado de llama y helados de cedrón, complementados con los vinos de la bodega.
Amalaya y Expansión
Dentro del Grupo Colomé, también se encuentra la bodega Amalaya, situada a 1700 metros de altura en Cafayate. Esta bodega complementa la producción de Colomé, ofreciendo una gama de vinos que también reflejan las características únicas de la viticultura de altura en Salta.
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La bodega Colomé, la más antigua de Argentina, no solo ha sobrevivido a lo largo de los años, sino que ha prosperado gracias a la innovación y la audacia. La introducción de viñedos a alturas récord ha permitido a Colomé producir vinos con características únicas y de alta calidad, ganando reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional. El legado de Donald Hess y la continua dedicación de su familia aseguran que Colomé siga siendo un referente en la viticultura argentina y mundial.