Impacto del paro general en Argentina, ha afectado al aeropuerto de Rosario con 14 vuelos afectados y 1,000 personas menos
El reciente paro general que abarcó todo el país dejó una huella significativa en la operación del Aeropuerto Internacional de Rosario. A tan solo 45 días del inicio del nuevo gobierno, las repercusiones se hicieron sentir tanto en los vuelos de cabotaje como en los internacionales. Con 14 vuelos reprogramados y una disminución de aproximadamente 1,000 pasajeros que transitaban por la terminal, las consecuencias se manifestaron en un reacomodamiento logístico y en la incomodidad de quienes se vieron afectados.
Cristina Carbonari, representante de la Asociación Rosarina de Agencias de Viaje, destacó que el paro generó un «reacomodamiento e incomodidad», obligando a buscar soluciones para garantizar que los viajeros no se vieran perjudicados. La anticipación por parte de las compañías aéreas permitió abrir la posibilidad de dejar pasajes abiertos o reprogramar vuelos, aunque la situación generó un efecto dominó que afectó la normalidad de las operaciones.
El presidente del Aeropuerto, Esteban Bretto, informó que un total de 14 vuelos fueron suspendidos y reprogramados, abarcando destinos como Brasil, Panamá, Aeroparque, Salta, Bariloche, Tucumán e Iguazú. Esta situación resultó en una disminución de alrededor de 1,000 personas que utilizaron la terminal en la jornada del paro.
En palabras de Carbonari, la actividad en el Aeropuerto estuvo «prácticamente desierta», resaltando que en casos como este, los costos adicionales, como noches de hotel extra, recaen en el consumidor o usuario, y no en las aerolíneas. A pesar de las adversidades, Carbonari subraya la importancia de la previsión por parte de las compañías aéreas para minimizar el impacto en los pasajeros.
Un aspecto destacado durante el paro fue la capacidad de viaje de Rosario Central hacia Tucumán para disputar un partido de la Copa de la Liga. El equipo logró viajar a tiempo en un vuelo chárter de la empresa LADE, evitando así las afectaciones del paro de Intercargo, que se sumó a la medida sindical.
Bretto resaltó que el Aeropuerto permaneció operativo, incluso con un personal mínimo y organismos públicos reducidos, gracias a la condición de Fisherton como aeropuerto alternativo en situaciones de emergencia o vuelos especiales para Ezeiza, Aeroparque y Córdoba. La anticipación en la gestión, especialmente en vuelos internacionales, fue clave para sobrellevar la situación.
A partir de la medianoche del día siguiente al paro, la operación del Aeropuerto volvió a la normalidad, marcando el fin de las complicaciones derivadas de la medida sindical.
El paro general dejó una marca significativa en el Aeropuerto Internacional de Rosario, afectando tanto la frecuencia de vuelos nacionales como internacionales. La anticipación y coordinación entre las compañías aéreas y la administración del aeropuerto fueron fundamentales para minimizar el impacto en los pasajeros. A pesar de los obstáculos, la capacidad de adaptación y la operación de vuelos especiales, como el chárter de Rosario Central, demostraron la resiliencia del aeropuerto frente a situaciones adversas. Con la normalización de las operaciones, el Aeropuerto retoma su rol como punto clave de conexión y movilidad para la región.
Con información de On 24